A sur de la tristeza y a leste de la torpeza
Se encuentra mi alma a que nadie ama
A sudeste se encuentran
Las cadenas montañosas de la infelicidad
Criadas por los vientos fríos
Venidos del océano de la irresponsabilidad
Combinados por la nieve del peso
De ser condenado a vivir cinco siglos antes del suyo
A norte están los lagos de la inteligencia
La zona con mayor atracción turística
Pero la gente con prisa se marchaba
Descubriendo que tales eran artificiales
El cielo era adornado con las estrellas de la esperanza
Constantemente interrumpidas por la niebla
Del miedo de los fracasos
El clima es templado y alguna veces calido pero agradable
Cuando existen turistas paseando por ella
Pero cuando el calor de los visitantes marchan
Caen precipitaciones frías
y algunas veces acompañadas de los granizos de la soledad
El relieve es inconstante
Y con cambios repentinos por veces
Pasando de la serenidad de los valles
Para la agudeza de las montañas
En el centro de mi alma se encuentra corazón
Formado por un conyunto rocoso
Por eso mí corazón no se abre
Cambia solamente de consistencia
Pasa del flácido para el estado rígido.
A norte de la tristeza y a leste de la torpeza
Se encuentra mi alma que a nadie ama.
Walter Pinto Leite, 2mil 7
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